Anoche vi
como el Río De La Plata ascendía
cubriendo el cielo de azules y violetas
era una inmensa bóveda leonada
donde los barcos juegan a ser estrellas.
Anoche vi
como el Río De La Plata , lúdico, soberbio,
envolvía mis tristezas
y me pregunté
¿Acaso no será mi ensueño?
Quizás la noche de abril, perfecta
en realidad bajó a las aguas leoninas
para enredarse con los barcos vagabundos
tejiendo secretos entre las algas y la luna
y de manera mágica secar los prismas
que huyen de mis ojos
entreteniendo, solo por un rato
la verdad de mis tristezas.***
ABRIL 2009